Hijo, ahora, ya no distingo los numeros en los relojes digitales, prefiero los de manecillas..
A veces, cuando me acuesto en la noche, repaso toda mi vida mirando girar las aspas del abanico de techo, me doy cuenta de cuánto rápido ha pasado, y de lo poco que me queda por vivir..
Hijo, tráeme un vaso con agua, espera a que me lo tome y llévatelo. A mi edad, ya no recuerdo donde los pongo o si los pateo y los rompo..
Todavía no es hora de mi pastilla, no me la traigas. Recuerdo que hoy me toca, pero no recuerdo a qué hora..
Pásame un cigarro, hijo, ése cabrón del doctor quiere matarme por no fumar. No sabe que es una de las pocas cosas que valen la pena en la vida..
Hijo, ves ése edificio? Yo ayudé a construirlo, recuerdo que fué en el cincuenta y tantos. Ves ése otro? Ahí estaba la Oficina de correos, la que se quemó cuando todavía no nacías..
Tequila hijo? No, gracias. Ya no estoy para esos trotes..
Peter La Anguila
Hace 2 meses.
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